Nuestras Alamedas abiertas....

Hace mucho que no escribía un post, debe ser que el mes más largo del año, o por lo menos el que se nos hace más largo, ha causado estragos dejándome ausente de este espacio por un tiempo.

Asi que, dejando atrás cansancio y demases, quiero hoy dejar una reflexión sobre sucesos que han causado en mí un importante remezón y que quisiera compartir con ustedes.

Hace poco asumió Michelle Bachelet, un hito simbólico en cuanto es la primera mujer en Latinoamérica que llega a ocupar el primer puesto público en una nación.

Todos desde los más incrédulos, los más contrarios y los más devotos de dicha mujer no pudieron esquivarla, al escuchar la radio, la televisión o si por esas cosas se le ocurrió o tuvo que andar por las cercanías de cualquier lugar público pudo percatarse que era el tema.

Dicho suceso y todo su antes y después trajo para mí una serie de sensaciones y reflexiones que tomaron vigor y me hicieron más partícipe de un país como el nuestro.

Desde que fuí a la finalización de su campaña presidencial, que tenía como bonus track escuchar(si es que acaso pudimos) a Ismael serrano, sentí como la CALLE había vuelto a ser un espacio público y de todos. Es decir, sentí en el aire que la gente volvió a recordar que podemos hacer de este espacio una fiesta donde nos expresemos tal cual somos, sin guanacos, sin bombas lacrimógenas pero sí con complicidad y sueños compartirdos...romántica visión??? puede ser, pero ver a mujeres sintíendo orgullo de serlo, a familias caminando por la Alameda sin temor en cargar a sus hijos y gritar una consigna me pareció destellante...

Por otro lado, irremediablemente me llevó a los ochenta cuando aún niña presencié y participé en la campaña del NO yendo al Parque O 'Higgins el mismo día en que cantó Florcita Motuda, Los Prisioneros...ese mismo día pude sentir muy fuerte la emoción de que ,estando en la estación Santa Ana, todos allí éramos una sola voz gritando NO!!!!! ... Tomarse las calles para gritar por el No era una manifestación popular que se escapaba del temor de antaño ...al fin podía serlo.

Luego de ese día de la finalización de campaña pensé que tal vez lo que sentí pudíese hacerse realidad y, hoy reafirmo la misma sensación, como no hacerlo luego de vivenciar el día internacional de la mujer mi reencuentro con familias, mujeres, jóvenes y viejos choros que sentados en el bandejón central disfrutaban de un acto que finalizó escuchando y bailando en jolgorio masivo "la Fiesta eres tú " de los Inti Illimani histórico.

Y, por último como no reafirmar mi convicción si en el acto cultural Canta América Canta el día después de asumir nuestra nueva presidente, veo como en un lugar tan simbólico como el frontis de la casa de gobierno se viven momentos colectivos como:

- cantar a grito pelado (perdonen mis cultos amigos por la expresión pero es la que me mejor refleja lo que quiero decir) el Manifiesto del querido Víctor en la magistral versión de Pedro Aznar;

- o también junto a niños, ex alumnos, amigas, amigos, gente querida alzar mis brazos para acompañar la canción Vuelvo de Inti Illimani.

Todo lo anterior adornado con escenas como el caminar por la Alameda y ver como familias terminaban tan brillante momento comiéndose un churro relleno con manjar de un carro que estaba en la misma calle,horas antes congestionada de micros y autos, tentando a quien por allí se asomara.

En resumen, las grandes alamedas se abrieron para que la gente se manifieste sin temor, por lo menos así lo siento. Sin duda, falta mucho por hacer, incluso me podrían inmediatmente decir, no solo de circo vivimos y dejénme decirles que estoy muy de acuerdo, pero eso nos puede dejar ausentes de disfrutar estas pequeñas grandes cosas???? hace cuanto que no vivíamos un domingo en que familias enteras traían sus banderas políticas y sin temor las hacían flamear en un lugar tan público como la Alameda????

Para mí no hay excusa, y es por ello mi necesidad de reflexionar junto a ustedes mi profunda emoción de ver a mi gente disfrutando de un espectáculo masivo donde la tolerancia se vistió de gala y en la cual todos fuimos iguales.

Fué sin duda un signo de alegría y de esperanza.

Un pequeño paso, pero recuerden que en lo invisible esta lo esencial.

Besos y pócimas para todos los que comparten mi vida.

CONY